miércoles, 5 de junio de 2013

Miércoles Mudo: Este fin de semana nos vamos a Londres



martes, 4 de junio de 2013

Caja de Nonabox de mayo


La cajita de Nonabox del mes de mayo vuelve repletita de productos monos y requete útiles. Espero que os gusten y los encontréis tan interesantes como lo he hecho yo. Recordar que mi cajita Nonabox es de bloguera, por lo que los productos que recibo son genéricos, pero si estáis interesadas en suscribiros la cajita que recibáis será adecuada a la edad de vuestro peque o al periodo de gestación en el que os encontráis.

  • Adaptador de Tetina de Béaba

Un invento estupendo que sirve para adaptar a todas las botellitas. Es muy útil tanto para cuando los peques aún no saben beber en botella como para cuando “por algún despiste” se nos olvida en bibi en casa y es la hora de comer de nuestra criatura. Yo de momento no lo voy a poder usar, ya sabéis que mi queridaa hija Mencía abandonó las tetinas a los 5 meses, pero espero que el siguiente dure algo más pegado al biberón.

  • Barrita para las picaduras de mosquitos de Chicco

Este producto me encanta, ayer lo utilicé para una picadura de mosquito asesino y el alivio fue inmediato. No contiene amoniaco así que también podré usarla en la delicada piel de mi peque.

  • Horquilla del pelo de Cuini

He de decir que me ha encantado y esto es algo bastante complicado porque la mayoría de accesorios del pelo para niñas me parecen de lo más repelente, hortera y rococó de la faz de la tierra. Es sencillo, resistente y agarra el pelo de Mencía bastante bien (algún día os hablaré de “la niña pelos”).

  • Mochila de Baby Einstein y mini libro del gato

Mencía está como loca con ellos. Desde bien pequeñita ha visto miles de vídeos de Baby Einstein y tiene muchos cuentos de esta marca (un poco chafados ya). La mochila se adapta a distintos tamaños y es una monada, ideal para la temporada de piscina que empezaremos la semana que viene.

  • Gel limpiador de manos de Moltex

Sin duda lo que más me ha gustado. Es muy práctico y de gran utilidad teniendo en cuenta como nos ponemos niños y mayores de sucias las manos. Una buena higiene es fundamental siempre, pero sobre todo cuando tratamos con los más peques. Es sin jabón así que no hay más que echárselo y limpio!

  • Chupete personalizado de Tutete

Este modelo es una monería, pero la verdad es que Tutete tiene unos diseños geniales y recomendables para cualquier ocasión. Además, los dibujos no se borran!

  • Babero de Babidú

Ideal para los recién nacidos, no sólo por su tamaño, sino por su tejido sedoso de algodón. Además el diseño es muy sencillo, como a mí me gustan.

  • Lupa de juguete de OTC

Es una lupa con el borde colores de madera estupenda para estimular la vista de los más pequeños. Los juguetes de OTC están especializados en la estimulación de los niños.

sábado, 25 de mayo de 2013

¡A mi niña le encantan los caballos!

K
Creo que ya os he contado en alguna ocasión que a Mencía le vuelven loca los animales. Y, sobre todo, los caballos. Desde bien pequeñita ha tenido predilección por las figuritas de animales. Se volvía loca cada vez que las veía en alguna tienda o descubría algún niño por la calle jugando con ellos... hasta que sus primos le regalaron unos cuantos "bichos" por Navidades. 
Inmediatamente se convirtieron en sus juguetes favoritos, por lo que poco a poco, con aportaciones de diferentes "benefactores", ha ido completando una buena colección de animales en miniatura. Tiene de toda clase: elefantes, cebras, leones... pero sus preferidos son los caballos. De hecho, al principio llamaba a todos los animales "caballo" y a día de hoy sigue siendo una de sus palabras favoritas. Bueno, esa y "pío, pío", que es como llama a los periquitos que le regalamos por su cumpleaños. Esa historia daría para otro post, pero basta con deciros que casi lo primero que hace por las mañanas y cada vez que entra en casa es buscar a sus pajaritos para decirles "hola". 
La relación de Mencía con los animales es curiosa, supongo que como la del resto de los niños, pero a mi me llama la atención porque es mi primera hija y, por tanto, descubro estas cosas a la vez que ella. Pues, como os decía, mi niña al principio mira con recelo a cualquier animal, luego se acerca paulatinamente y, finalmente, acaba por querer tocarlos. Así que ya os podéis imaginar la cara de susto que se le puso la primera vez que vio un caballo en vivo y en directo en una de las excursiones que hemos hecho este invierno con nuestros encantadores vecinos. Al principio no quería verlos ni en pintura, a diferencia del resto de niños (más mayores la mayoría) que venían con nosotros. La siguiente vez ya le gustaron algo más, aunque tuve que cogerla en brazos y tocar yo primero al caballo para que la niña le fuese perdiendo el miedo. Y lo hizo, ya que al final del día consintió que Juan, uno de los vecinos que la adora (ha "amenazado" varias veces con llevársela a vivir a su casa y eso que tiene tres niños y un cuarto en camino), la subiese encima de uno. 
Por eso, cuando entró en la Feria de Jerez y vio cientos de caballos andando sueltos, montados por jinetes y tirando de coches engalanados para la ocasión no cabía en sí de alegría. Enloqueció y sólo decía "caballo, caballo" y así se pasó un buen rato. Tanto que al día siguiente su abuelo, su padre y su prima la llevaron a la Feria del Caballo para que viese más animales. Y ella encantada claro. Es increíble cómo le gustan los caballos y el interés que le suscitan. Empiezo a pensar que debe ser herencia genética o algo así. Creo que hasta alguna vez ha soñado con ellos porque nada más levantarse ha dicho "caballo" (otros días dice "pintar" o "pete" si está buscando un chupete). En fin, que como siga así creo que a su padre no le va a quedar más remedio que ceder a mis deseos y apuntarla a clases de equitación, aunque para eso desgraciadamente aún quedan unos años...

miércoles, 22 de mayo de 2013

¿Qué le pasa a mi hija?

Llevamos varios días notando que Mencía está un poco rara. Quiere más mimos de lo normal, está muy irascible, llorona y no quiere jugar con nada ni con nadie...
Lo único que le calma es ver su Tan Tan del alma (los dibujos de Little Einstein que le encantan), estar en brazos y que su mamá le de la manita.
La hemos revisado de arriba a abajo, termómetro, barriga, piojos, los dientes... y no hay manera, no hemos sido capaces de saber qué le pasaba a la peque.
Anoche, al ir a arroparla y darle un besito antes de acostarnos nos la encontramos despierta y hecha una bolita en la cama, la pobre no se quejaba pero quería que la abrazases, le pusimos el termómetro por enésima vez pero nada, 36,9 grados así que nos fuimos a dormir. Se ha despertado varias veces esta noche, pero lo máximo que hacía es ponerse a charlar un poco y dormirse enseguida.
Esta mañana se ha despertado súper tonta, no quería saber nada de su padre (al que por supuesto adora) y se quejaba por todo. Cuando he ido a verla le hecho un chequeo casero completo, hasta que se me ha ocurrido preguntarle ¿qué te duele Mencía? y me ha señalado el oído derecho diciendo: aquí.
Hemos repetido la maniobra varias veces, efectivamente a la pobre niña le dolía el oído, mañana la llevamos al pediatra y a ver qué nos dice.
Este post lo considero un poco surrealista, pero la situación me ha hecho pensar en cúanto nos complicamos a veces la vida sin darnos cuenta de que nuestros peques van creciendo y comienzan a mostrarnos sus pensamientos e ideas, ¿no os parece?